El poliéster es una gran solución para la reparación de paredes y suelos de piscinas que estén dañados por la acción de diversos agentes físicos o por el simple paso del tiempo. Los revestimientos de poliéster consisten en aplicar una capa de poliéster sobre la superficie dañada para que esta adquiera las características de este material. El poliéster garantiza un acabado liso y sin fisuras, impermeable, fácilmente lavable y resistente a la adherencia de productos químicos y microorganismos.